top of page

Estaciones de Isadora


Digámoslo desde el principio, Estaciones de Isadora es una obra fallida. La combinación de danza, texto lírico, dramaturgia y música ha dado lugar a obras exquisitas, pero su dificultad para conseguirlo depende de muchos factores; la empatía con el público en este tipo de espectáculo es más exigente, más delicada.






Estaciones de Isadora tiene sólo una idea sugerente al inicio: entra un pianista que, a la antigua usanza, se prepara el piano y la partitura (el pianista será un personaje más, aunque casi accesorio, y lo dejan ya intuir). Isadora, la actriz y balilarina Beatriz Argüello, empieza bailando una pieza del Lago de los cisnes con el tutú clásico y al modo de ballet clásico. Acaba su número (por cierto, bastante mediocre), y nos dice que ella, Isadora, prefiere ser la frágil griega de las vasijas y se desprende de su vestido... aparece con el vestuario volátil típico de Isadora, se lava y se desprende de su maquillaje, sus pestañas postizas... Y aquí acabó todo.

A partir de este punto, Beatriz Argüello declama (a veces se desgañita y casi pierde la voz) frases de supuesta poesía, expresando hasta la extenuación que ella sufre, que siente dolor. Hay algunos momentos que me recuerda a una mujer que sufre histerismo y la culminación llega, ¡qué modernos!, cuando abre las puertas de la salida de emergencia del teatro y sigue declamando "a grito pelado" hacia los viandantes que hasta entonces paseaban tranquilamente por la plaza Santa Ana.La escenografía de los números es muy pobre, Beatriz Argüello es una buena bailarina pero aquí está desaprovechada. El pianista Mikhail Studyonov defiende correctamente un repertorio clásico. Es evidente que la idea de Hugo Pérez de la Pica me ha dejado frío, helado.


El final con la grabación, a todo volumen, de Pompa y Circunstancia de Elgar es el colofón de mal gusto que se precisaba para rematar esos eternos 50 minutos de espectáculo.



Aunque pueda parecer inadecuado, quisiera recordar aquí una obra que, uniendo danza y poesía, consiguió emocionarme, maravillarme. Criatura fue un delicado y gran espectáculo.



Estuvo en mayo del 2016 en Nave 73 y hubiera merecido una difusión y un éxito conforme a sus méritos. Pero las oportunidades en el mundo del teatro muchas veces no están acordes a la calidad.

Busco...
PRÓXIMOS RETOS
OBRAS DE TEATRO
OBRAS DE LITERATURA

Únete ahora a nuestra lista de correo

bottom of page