Canción dulce (2016) de Leila Slimani
Un retrato perturbador sobre la convivencia de una familia y una extraña. Inciso, clarividente y despiadado.
En las cuatro primeras páginas Leila Slimani describe la escena de un crimen con una claridad, brevedad y contundencia que nos ata al libro desde el principio. Adam (el niño más pequeño) ha muerto, Mila (la mayor) morirá pronto. "La madre estaba en estado de shock. Eso dijeron los bomberos, repitieron los policías, escribieron los periodistas". "A la otra también tuvieron que salvarla. Con la misma profesionalidad y sangre fría. No supo morir. Solo dar muerte"
Tras esta introducción, la autora nos cuenta la vida de una pareja en la que la esposa, tras su segundo hijo y frustrada por su vida de ama de casa, decide ejercer su profesión de abogada. Encuentran a la niñera ideal, Louise, la que se ha ganado a los niños desde que la conocen: "Su rostro es como un mar en calma, del que nadie sospecharía los abismos que encierra".
Algún detalle nos va introduciendo en la situación distorsionadora que producirá el estallido final. Un ejemplo inquietante es el juego del escondite: la niñera, oculta, observa a los niños cuando se desesperan por no encontrarla, el terror que muestran cuando piensan que ya no va a volver...
El texto nos va describiendo el perfil psicológico de sus personajes, sus egoísmos, la inevitable falsa relación de familiaridad entre la pareja y su contratada, la falsa naturalidad de convivencia durante unas vacaciones en Grecia, la pérdida de confianza ante cualquier incidencia, la soledad de la niñera y la ensoñación de convertir esos niños en su familia. Vamos conociendo las miserias de la vida de Louise. Un detalle: en una boda la emparejan con un hombre nada atractivo, desdentado, que huele a pepino y alcohol, se resigna a esa humillante situación: "acepta, como acepta la ropa usada, las revistas ya leídas a las que les faltan páginas"
La forma de escribir de Leila Slimani queda clara en la selección de texto que he hecho. Con una narrativa convencional es capaz de arrojarnos en una concisa frase todo un perfil psicológico, describirnos una vivencia completa.
Una magnífica novela, la segunda de su autora. El premio Goncourt vuelve a demostrar, otro año más, su acierto al seleccionar su ganadora.
Editorial: Cabaret Voltaire
Páginas: 278
Cabaret Voltaire se está convirtiendo en una editorial de referencia con una selección de grandes textos, lejos de convencionalismos.
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