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La duda


¡Cómo he disfrutado de esta genial obra! Darío Facal volcado en el texto y los actores, la interpretación apabullante, el tema complejo y actual que permite, a través de los diálogos y los silencios, la reflexión. Paso fugaz por Madrid, cuatro días que deberían haber tenido mayor recorrido en el retorno de este montaje.








En una escuela católica de los años 60, en pleno Bronx, la hermana directora Aloysius tiene dudas sobre el comportamiento del padre Flynn que se encarga del culto de la iglesia y es su superior jerárquico. La directora entrevista a James, una joven e inexperta hermana para saber si ella ha detectado algo extraño en el padre y le pide que observe su conducta. La hermana joven piensa, sin poder definirlo, que la actitud del padre hacia un alumno, el primer estudiante de color aceptado en el colegio, es diferente a la que mantiene con otros estudiantes. La duda se ha generado.


La obra plantea uno de los temas más difíciles para la convivencia: la duda y la confianza. ¿Cuáles son los límites para empezar a sospechar de alguien? ¿hasta dónde llegar para esclarecer la verdad?

Al mismo tiempo, los dos personajes principales se enfrentan por sus diferentes ideas sobre educación, por la forma de entender la religión y la aceptación de los cambios que la sociedad ha ido haciendo. Dos formas de ver la vida muy diferentes, dos caracteres opuestos que chocan, un enfrentamiento inicialmente sutil en la búsqueda de lo que piensa cada uno del otro.


Carmen Conesa y Ernesto Arias demuestran que son unos monstruos de la escena. Es un privilegio verlos metidos en la piel de estos magníficos personajes, la aparente sencillez con la que desarrollan sus papeles. Ilena Wilson está muy bien en su rol de ingenua hermana.


La dirección de Darío Facal ha sabido sacar el máximo provecho al rico texto que tenía en sus manos. Me ha sorprendido por su renuncia a su marca personal a la que nos tiene habituados y que en esta obra no hubiera tenido sentido. Genial.


Un decorado sencillo nos permite ver el despacho de la directora y los accesos al mismo. Un largo muro y su camino nos deja ver la llegada y salida de los personajes, observar sus actitudes (antes y después de la conversación). Un foco iluminará al párroco durante su homilía fuera de la escena. Los tonos blancos predominan en la escenografía.


He echado de menos que la obra hubiera tenido mayor duración para dar algo más de desarrollo a sus personajes.

Una obra profunda llevada al escenario con la magia del trabajo sólido y bien hecho que hace brotar una luz única y especial sobre las tablas. Bravo por los actores, la dirección y el texto.

Texto: John Patrick Shanley

Dirección: Darío Facal

Actores: Carmen Conesa, Ernesto Arias, Marta Wall, Ileana Wilson

Ayudante de dirección: Javier L. Patiño

Escenografía: Thomas Schulz

Vestuario: Elena Gijón. Cuarto Ropero

Iluminación: Manolo Ramírez

Música: Room 603

Producción: Metatarso

Teatro Galileo 14 a 17 de septiembre de 2017

Duración: 75 minutos




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