Escombros (2021) de Fernando Vallejo
Esta última novela publicada por Fernando Vallejo (79 años) acentúa las características extremas de su narrativa: cinismo, amargura y crítica hacia todos y todo, lenguaje directo, acerado y caótico. A pesar de sus imperfecciones hay algo que sigue atrayendo y no puedes dejar de leer. Escritor a la vuelta de todo y sin tapujos siempre te genera curiosidad. No apto para lecturas convencionales.
Agrio, irónico, despectivo con todo, a ritmo frenético nos arroja pensamientos a bocajarro en primera persona: su protagonista es el alter-ego del escritor. La excusa argumental sería anecdótica si no fuera por las terribles circunstancias vitales. Fernando/Personaje revive el día del terremoto en México D.F. que dejó su edificio en ruinas cuando vivía allí con su perra y con David, su pareja demenciada que fallecería poco después. La muerte de David es el motivo de su retorno a Colombia tras más de cuarenta años de exilio.
Describe a un anciano que se siente al final de su vida y no reconoce el mundo al que vuelve, desprecia la sociedad mexicana y colombiana, a los seres humanos en general.
Autoficción escrita en el habitual estilo de Vallejo, descuidado y deslenguado a partes iguales. En esta ocasión cae en excesivas redundancias, banalidades, con párrafos inconexos que siguen la ebullición de su pensamiento/escritura. Introduce absurdos de forma intencionada, parece que sólo con la idea de jugar y desconcertar al lector. No he encontrado en este libro la sustanciosa crítica que podía disculpar ese echar cuentas con la sociedad, quedarse a gusto sin medida, no hay capas que descubrir en este texto plano escrito para él mismo. A veces toca fondo con chistes e ironías tan poco acertados que producen sonrojo. Las referencias a Einstein, por poner un ejemplo, son un desatino.
Con frecuencia cae en el insulto gratuito, la palabrería soez para fusilar aquello que le place.
Es cierto que sigue despertando curiosidad, continúas con la lectura del libro esperando encontrar algo más que simples exabruptos o sinsentidos. Algunas veces así es, pero muy escasas, ecos de tiempos mejores.
Para incondicionales de Fernando Vallejo.
Editorial: Alfaguara
Páginas: 196
