No me acuerdo de nada (2010) de Nora Ephron

"No me acuerdo de nada" es un libro en el que en un estilo desenfadado e irónico Nora Ephron (1941-2012) nos habla del pasado, de aquella sociedad machista en el mundo del periodismo y del cine. Irregular, con una parte central en la que pierde rumbo, resulta una lectura muy entretenida.

El libro empieza y termina con la parte más personal de su presente, la pérdida de memoria y la vejez, y un listado con las cosas que echará o no echará de menos. Pero sin perder el desenfado, la aparente ligereza, el humor que atravesará todas sus páginas.

Capítulos breves en los que nos cuenta anécdotas de muy diferente índole y que van, como páginas sueltas de su historia, creando un rápido bosquejo de la vida de Nora Ephron. Unos padres que eran guionistas de cine y que se codearon con el mundillo hasta que se volvieron alcohólicos y perdieron el rumbo, cuando ella era una adolescente. Sentimientos que pasan de la idolatría infantil hacia los padres, el amor incondicional y, luego, al odio que hace desear que se mueran. Y aunque parezca dramático (en el fondo lo es), el tono no lo permite, hay sarcasmo, cinismo, una mirada alejada. Como su experiencia laboral inicial en el periodismo en el que las mujeres son relegadas a trabajos propios de becarios frente a los hombres que presentan los mismos méritos.

Todo esta parte más personal es lo mejor del libro y la que nos hace ver que nuestro tiempo ha cambiado mucho (aunque no lo suficiente). También la descripción de ese mundo laboral que ahora nos parece de otra era ante los cambios tecnológicos que ha sufrido la industria: estamos hablando de los años 70.

El consumismo, la absurda sofisticación de la sociedad adinerada, las conversaciones banales que retratan un espectro social de nuevos capitalistas, constituye otra parte importante de estos relatos.

Es una lástima que, en numerosas ocasiones, pierda interés o fuerza el libro al entrar en detalles pormenorizados de personajes que desconocemos o dedique mucho tiempo a anécdotas que no merecen contarse por su simpleza, partes que se transforman en cotilleos sociales propios de revista sobre famosos o famosillos (que ahora el tiempo ha podido borrar).

Nora Ephron ha conseguido entretenerme y trasladarme a una época y una sociedad que conoció de primera mano. A pesar de sus intenciones, ha quedado un poso de melancolía.

Editorial: Libros Asteroide

Páginas: 165

Nora Ephron fue periodista y escribió varias novelas y libros de ensayos. Su fama internacional vino con los guiones de "Silkwood", "Cuando Harry encontró a Sally" y sobre todo con la dirección de "Algo para recordar".